La editorial Utopía Libros preparaba, como cada año, la primavera, esa que siempre florecía, con más libros, más poemarios, más aventuras y más sueños…
El pasado jueves 12 de marzo nos fuimos a la cama con la satisfacción del deber cumplido y nuestros sueños puestos en la inminente temporada alta literaria; al día siguiente nos vimos -como otros tantos- sorprendidos por el azote de esta nueva enfermedad: el covid-19, «la del coranovirus» . De ella algo habíamos oído hablar en las noticias, pero sin conocer su virulencia, así que, sobresaltados, abandonamos todo en cuanto nos habíamos embarcado y nos dispusimos a protegernos del enemigo, nuevo, desconocido.
Libros en formación a la espera de una orden que no llega. Libros esperando una mano inocente que los deje caer cariñosamente y con sigilo en una bolsa. Web de librería, ansiosa y expectante de ser abierta y sentir suavemente el ratón de librería entrar en su fondo, buscando algún relato o poema que echar al carrito virtual de la compra.
Hoy, 23 de abril, Día del Libro, en esta fecha tan importante para la cultura, hago un llamamiento a editoriales, distribuidoras, librerías, autoras y autores, y a personas lectoras. Su compromiso con la lectura y leer cinco minutos más, leer cinco páginas más y regalar un libro más. Reivindicar el libro como herramienta de libertad y la lectura como alimento de la inteligencia, apelando al sustento de la cultura y el sostén del conocimiento y al medio pan del librero que comparte con los autores y con este humilde editor.
(Ricardo González. Columna de opinión, Diario Córdoba)