Rafael Mir Jordano

Rafael Mir Jordano

(Córdoba, 1930). Licenciado en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid, ha ejercido la abogacía, además de trabajar como gestor cultural y profesor universitario. Fundó y dirigió las revistas literarias Arquero de poesía (Madrid, 1952) y Revista del Mediodía (Córdoba, 1958). Impulsó el cineclub del Círculo de la Amistad. Fue el primer delegado de Cultura de la Junta de Andalucía en la provincia de Córdoba (1978). Fundó la Asociación de Amigos de los Museos de Córdoba (1988) y la presidió durante ocho años. El Ateneo de Córdoba le concedió una de sus Fiambreras de Plata (1987), y es socio de honor desde 1989. Es miembro de la Real Academia de Ciencias, Bellas Letras y Nobles Artes de Córdoba. Como articulista destaca su colaboración en el Diario Córdoba. Entre sus publicaciones encontramos dos antologías de artículos Lo escrito, escrito está (Arca del Ateneo, 1995) y Miradas. Jugando a perder (Fundación Prasa, 2006); la edición de Cuentos extranjeros (Rumbos, 1952), encargándose de la selección; la obra de teatro Sala de Juntas (Arca del Ateneo, 2007); y el ensayo Caza mayor en España. Y más lejos (Al-Ándalus, 2004). Pero su actividad como escritor destaca en el apartado narrativo, con los libros de relatos: Cayumbo (Ágora, 1995), Estamos solos (Ánfora Nova, 2002) y Cuentos de una cuarta (Centro Cultural de la Generación del 27, 2006); ha sido incluido en las antologías Cuentistas contemporáneos (Rumbos, 1958) y 27 narradores cordobeses (Centro Cultural de la Generación del 27, 1999). Su primera incursión en la novela fue con Furtivos (Almuzara, 2006). También ha publicado un libro de memorias Memorias en el umbral de la desmemoria (El Páramo, 2009).

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  • Memorias en el umbral de la desmemoria

    Memorias en el umbral de la desmemoria

    Rafael Mir Jordano

    “Las memorias, al menos las que interesan, solo las escriben los hombres importantes y yo no lo soy”, declara el autor. Pero Rafael Mir Jordano se contradice al instante, porque su memoria resulta ser la de un hombre de acción, que desarrolla su labor en el mundo de la cultura y del derecho, siempre rodeado de personajes destacados en los más diversos ámbitos (fácilmente localizables en el índice que aparece al final de la obra). Estamos ante un viajero incansable, amante de la caza, hábil observador, controvertido tertuliano, académico serio, escritor curioso y, ante todo, un ciudadano que sabe mirar de frente.


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